BASTA DE TRUMP!
BASTA DE TRUMP!
Desde que lo nombraron presidente electo, todos estamos muy al pendiente de cada palabra que sale de su boca, sintiéndonos ofendidos y agraviados constantemente.
Resulta más fácil ver al vecino que a nosotros mismos. Porqué esperar del otro lo que nos corresponde a nosotros. Los que debemos de reconocernos somos nosotros y no Trump.
Dejemos de seguir esperando el reconocimiento de alguien que poco le importa nuestro destino, comencemos por nuestra casa evaluándonos a nosotros mismos, enfrentando nuestra realidad por más dolorosa que sea.
La culpa no es de Trump, siempre es más fácil culpar al ajeno de nuestras desgracias, a esta actitud se le llama inmadurez, culpar al otro de nuestra situación es no querer vernos, es negar nuestra responsabilidad, es poner la esperanza y nuestro destino en alguien ajeno.
Trump nos dio una gran lección; nos está forzando a ocuparnos de lo nuestro, la inseguridad, la crisis económica, el gobierno que tenemos, la impunidad, no es culpa ni de Trump, ni de EU, ni del mundo. Es lo nuestro, y el deber de trabajar en México únicamente nos corresponde a nosotros los mexicanos.
Qué importa lo que Trump diga o deje de decir, haga o deje de hacer, nuestro futuro depende de nosotros y de nadie más.
Asumamos nuestras responsabilidades y enfrentemos nuestra realidad, empezando por nuestra auto percepción de nación, valorando lo que sí tenemos. México es rico en capital humano y en recursos naturales, ¿porqué no enorgullecernos de lo que hemos logrado desde nuestra independencia?
Admitamos humildemente nuestros errores para recobrar nuestra dignidad, enfrentemos de una vez por todas nuestros complejos para dejar de sentirnos disminuidos y menospreciados, para así emerger con orgullo como una nación multifacética que tiene la capacidad de trazar su propio destino sin dejarlo en manos del extraño.
¡Hagamos las paces con nuestro pasado y con nuestra identidad de una vez por todas! reclamemos, exijamos y trabajemos por lo que merecemos, demandemos gobiernos competentes, funcionarios honestos, digámonos la verdad, enfrentémonos cara a cara y sin excusas con nuestra realidad, para que a partir de ahí crezcamos sanamente como una nación responsable de su propio destino.
Basta de complejos, desde el fondo de nuestro espíritu hay que creérnosla, somos un gran país, y como el lema de Trump: Hay que hacer a México grande! Por primera vez.
Karen Bensussen.
kbkbensussen@gmail.com
www.estudiosmundo.com
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